Tía y sobrina se ponen a comerse los coños en la cama, que zorras

Llegan las fiestas de Navidad y esta muchacha universitaria vuelve a casa de su tía para pasar unos días con ella, ha terminado la universidad y ella estaba como loca por poder ver a su tía, la recibe con los brazos abiertos porque hace un año que no la ve y claro, tienen ganas de hablar de sus cosas y de contarse todas las cosas. Cuando la chica está durmiendo la siesta porque está agotada del camino, la tía va a su dormitorio y la ve durmiendo con esas braguitas que la ponen muy caliente, tanto como para despertarla y tocarla el coño, besarse por todo el cuerpo y acabar en su coño jugando y disfrutando de una buena follada incestuosa entre tía y sobrina.