Descripción
Por supuesto, como le hubiese ocurrido a cualquier hombre, al entrevistar a Samantha Hair por el curro de niñera, se me puso la polla dura de solo imaginármela desnuda. Claro que sabía que la relación que tendríamos sería exclusivamente profesional. Era plenamente consciente de que tenía que controlar mis instintos y no pasarme con ella. Sin embargo, cuando la pillé con las manos en el coño, se me presentó una excelente oportunidad para extorsionarla. Podía echarla sin problemas por haberla pillado masturbándose en horas de trabajo, pero a cambio de una mamada y una rica follada, le di una nueva oportunidad.
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