Descripción
Kimmy Grander sí que sabe lidiar con los tímidos. Ella es una experta masajista desde hace muchos años, pero además es muy putona y le fascinan las pollas. No hay vez que no acabe follándose al algún cliente. A veces hasta lo hace de gratis. Por eso, cuando este chaval tan tímido se acostó sobre la cama, la guarrilla supo bien lo que tenía que hacer para conseguir que se la follara. Cuando lo puso boca arriba el tío se moría de vergüenza, así que se la rubia se desnudó quedándose en tetas con una sexy tanga roja que pronto desapareció. Con una de sus espectaculares mamadas, le quitó la timidez y consiguió que acabara follándosela como todos. ¡Menos mal! Hubiese sido una pena que se perdiera de cabalgar sobre semejante polla.
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