Descripción
Mi vecina no es una tía demasiado atractiva. No solo por la edad, ya que es bastante madura, sino porque ni siquiera de joven ha sido guapa de cara. Sin embargo, de cuerpo no está tan mal, aunque yo no lo sabía hasta ayer. De repente, la zorra se dejó abierta la ventana de la casa que da justo al baño. Como estaba sola, se metió a ducharse con la puerta abierta y yo, por primera vez, pude ver su cuerpo desnudo. La verdad es que jamás pensé que podía ser tan guapa desnuda. Tiene el culo en muy buenas condiciones, unas tetas aun firmes y un coño que dan ganas de chupárselo toda la tarde. ¡Qué rica paja me hice espiando a mi vecina española en bolas!