Descripción
Antes de apuntarse en la universidad, esta hermosa jovencita rubia tenía pensado conservar su virginidad anal hasta después del casamiento. Quería reservarle el culo a su futuro esposo para que tuviera un incentivo para casarse. De esa manera, su noche de bodas sería inolvidable para ambos. Sin embargo, cuando entró en la universidad se dió cuenta de que le sería muy difícil cumplir su sueño. Allí todas las zorras se dejaban petar el culo por cualquiera, así que si se enteraban que pretendía seguir siendo virgen el ojete, se convertiría en la empollona mojigata de toda la uni. Por eso, se dejó romper el culo por el primer tío que se la ligó… ¡y como le dolió!